Mira,
pocas cosas me hacen sentir más intensamente la tristeza que ver llorar a alguien,
especialmente si es un perro,
entiendo que muchas emociones de los perros no son entendidas por las personas
porque nadie les ha explicado que sienten tristeza, frustración, desesperanza, soledad
y ganas de tirarse por la ventana muchas veces,
ante nuestra completa ineptitud de entender que igual que un niño pequeño siente un millón de emociones a lo largo del día,
los perros también, pero peor.
Y POR QUÉ SE SIENTEN ASÍ?
Porque la gente no sabe que si no conoce a su perro,
va a tener un perro infeliz que por no saber satisfacer sus necesidades más básicas como especie,
va a convertir su vida en un martirio, y en la de su humano, también por extensión.
(Por eso tengo tanto trabajo, para ayudar a llevar estas situaciones antes de que se desborden del todo…)
Y porque a nadie le han dicho que los observe,
desde dentro,
desde el alma,
DE IGUAL A IGUAL
que es la única forma de respetar y cuidar al otro,
ya sea tu pareja o tu perro,
al final las relaciones desde el amor siempre son lo mismo.
Conocer al otro,
comunicarse bidireccionalmente para que ninguno de los dos necesiten enfadarse,
respetarse y entender que necesita cada uno y…
Pedirlo amablemente.
Si quieres saber cómo lo hago para poder tener la relación intensa,
de confianza absoluta con mis perros,
de infinita alegría tanto en casa como en la calle cuando salgo con ellos,
y la plenitud de elegir que me acompañen da igual el lugar a donde quiera ir,
porque disfrutamos juntos y en calma de nuestro tiempo libre…
Te lo explico,
AQUÍ