Mira,
Solo con escuchar en mi día a día lo que me cuentan sobre perros, podría escribir historias
para los emails durante años sin esforzarme.
De hecho estoy escribiendo un libro gracias a todos los problemas que tiene la gente y
que me paga para que le resuelva.
Un libro sobre las emociones de los perros, que cuando se alteran acaban dando un
montón de problemas en la convivencia y cómo evitar que eso ocurra.
Un problema muy habitual, es entre vecinos con perros.
Como que su perro le ladra al perro del vecino en la valla y que están a punto de denunciarlo como no se calle, porque el vecino es un tocapelotas que le insulta cada vez que se asoma al jardín y esas cosas.
Y es que a veces, sí que es verdad que te planteas si vender tu casa y emigrar a Cuba para no oírlo ( al vecino, no a tu perro) o tirarlo al mar, al vecino claro.
Tu perro habría que saber qué le debe de estar diciendo…
Pero esto de que los perros cuando ladran dicen cosas es algo realmente desconocido para las personas.
El otro día me crucé con una señora que se paró a saludarme después de una de mis clases.
Mirando al teckel con el que estábamos trabajando, me dice:
Uy, estos perros ladran mucho…
A mí me dio la risa, y le contesté que claro, depende de lo que tuvieran que decir…
Me miró sin entenderme, pero tampoco me molesté en explicárselo, la verdad.
Lo cierto es que cuando los perros ladran, están diciendo con total claridad, qué sienten, qué necesitan o simplemente que están hasta las pelotas de que los puteemos sin ser ni siquiera conscientes de ello.
Siempre con la mejor intención, y queriendo lo mejor para ellos, o mejor dicho lo mejor para nosotros, que es al fin y al cabo que nos hagan caso.
Lo que quiero decir es que para que los perros nos hagan caso, lo primero que necesitan es entender nuestras palabras clave, y lo que hacemos es cambiar las palabras constantemente para pedir la misma cosa.
Lo segundo es, que un educador experto en gestión emocional, nos explique cómo hemos de hacerlo para que nuestro perro se pueda habituar sin asustarse a vivir en un mundo de humanos.
Que es a lo que me dedico básicamente en los últimos ocho años y medio desde que fundé Chamán, a ayudar a las familias a entender a sus perros y solucionar así los problemas de convivencia.
Esto que es tan obvio, no lo entiende nadie hasta que se lo explicas y a veces ni a sí.
Dan por sentado que su perro no se asusta la mayoría de veces de mil cosas y no es así.
Y si obvias las emociones de tu perro mucho tiempo pueden pasar dos cosas:
La primera cosa es que cuando salga a la calle ladre como un poseso para explicarle al mundo cómo se siente.
( Por eso no es que hayan razas que ladran mucho o perros mudos, es que hay perros con problemas que necesitan explicarlo y otros que no)
La segunda cosa es que depende de la potencia y carácter de su perro como le toques mucho los churumbeles, igual te explica cómo se siente… Y no te va a gustar.
Para los que quieran dejar de tocar los churumbeles a su perro, y empezar a disfrutar con él de una vida feliz y en calma…
SERVICIOS DE TRADUCCIÓN CANINA, GESTIÓN EMOCIONAL Y EDUCACIÓN CANINA